Comunicación vía documentación

Cuando pensamos en comunicar algo solemos visualizarnos hablando con una o varias personas, bien de manera oral o escrita. Activamente alcanzamos a quien debe recibir el mensaje para entregarle la información que queremos transmitir.

Pero no siempre es necesario que contactemos con la parte receptora, pues también podemos comunicarnos sin iniciar el proceso. ¿Y cómo lo hacemos? La respuesta es clara; documentando.

Gracias a nuestra agenda de trabajo podemos comunicar nuestro horario laboral, la disponibilidad para que nos contacten y programen reuniones, ausencias, etc.

El estado de Slack (o cualquier otra herramienta de comunicación) también puede proporcionar información útil como avisar si podemos atender o no a alguien, si estamos de vacaciones o si nos encontramos disponibles.

Las respuestas automáticas de nuestro email son otra forma de comunicarnos. Es siempre una buena idea avisar si estamos de vacaciones informando de la fecha de retorno, así como indicando una persona de referencia que pueda atender las peticiones mientras estamos fuera.

Utilizar un software de seguimiento de proyectos como Jira ayuda a que toda persona interesada en saber sobre el progreso de una tarea pueda hacerlo de manera sencilla.

Ten presente que documentar es comunicar, y existen muchos medios de comunicación ampliamente conocidos. En lugar de dar la misma respuesta una y otra vez documéntala en un sitio centralizado para que todo el mundo la vea. Las personas interesadas obtendrán la información de manera sencilla, y tu evitarás las interrupciones.

Luchar contra las interrupciones

¿Cómo podemos luchar contra las interrupciones?

  • Elimina los interruptores: Quita alarmas, notificaciones de WhatsApp, Telegram, Slack… Elimínalas de raíz.
  • Ojo con el móvil: ¿Esperas una llamada de vida o muerte? Pues siléncialo y ponlo boca abajo. Revísalo cada cierto tiempo en lugar de con cada notificación.
  • Enfócate: Recuerda el propósito de la tarea y prepárate para comenzarla.
  • Aísla la tarea: Si te piden algo ¿es obligatorio y vital que pares y lo hagas ya? Siempre es preferible apuntarlo para más adelante y volver a la tarea inicial.
  • Trabaja en bloques cortos: Es más fácil bloquear completamente las interrupciones si trabajas en tareas de menos de 30 minutos. Divide y vencerás.
  • Comunica tus rutinas: Si no se te puede llamar hasta las 10.00 que todo el mundo lo sepa.
  • Frena a la gente pesada: Siempre hay una persona que le gusta interrumpir sin miramiento. Ponle límites.
  • Comunicación concisa: Responde de manera breve y directa. Estructura tu mensaje para reducir la llamada actual, y dejarlo todo claro para que no sea necesaria una nueva llamada futura.
  • ¡No interrumpas tú! Si no te gusta que te interrumpan, no te dediques a interrumpir.

Pon en marcha cuanto antes estos puntos y verás que es más fácil de lo que esperabas.